La mina Tambomayo, conocida por su producción de oro, plata, plomo y zinc, enfrenta desafíos en el segundo trimestre, pero mantiene firmes sus expectativas para el 2023. El análisis de las cifras trimestrales muestra una imagen mixta, pero Buenaventura se mantiene confiada en sus proyecciones a futuro.

El segundo trimestre del año en la mina Tambomayo, propiedad de Buenaventura, ha presentado un cuadro de contrastes en la producción de metales preciosos y básicos. Mientras que la producción de oro experimentó una disminución interanual del 24%, llegando a 10,896 onzas, la producción de plata mostró un incremento del 25%, alcanzando las 540,732 onzas.

En cuanto a los metales base, la producción de plomo y zinc en la mina Tambomayo registró 924 y 1,150 toneladas, respectivamente. Estas cifras, sin embargo, representan una considerable disminución en comparación con los niveles del trimestre anterior, con una caída del 67% y del 71% en la producción de plomo y zinc, respectivamente.

A pesar de estos cambios en la producción, las cifras registradas estuvieron en consonancia con las previsiones establecidas por la empresa. Este hecho evidencia que, a pesar de las fluctuaciones, Buenaventura sigue manteniendo un sólido control sobre sus operaciones y sigue siendo capaz de predecir con precisión su rendimiento productivo.

Durante el segundo trimestre, Buenaventura logró vender un total de 9,868 onzas de oro y 485,593 onzas de plata procedentes de la mina Tambomayo. Las ventas de plomo y zinc, por otro lado, alcanzaron las 808 y 895 toneladas métricas, respectivamente. Estos volúmenes de venta, a pesar de los cambios en la producción, evidencian la continua demanda de los productos de Tambomayo en el mercado.

En términos de perspectivas para el futuro, Buenaventura mantiene sin cambios sus expectativas de producción para el año 2023. La empresa proyecta una producción de oro entre 35,000 y 40,000 onzas, de plata entre 1.9 y 2.2 millones de onzas, de plomo entre 2,900 y 3,200 toneladas métricas y de zinc entre 4,800 y 5,300 toneladas métricas.

En resumen, a pesar de los desafíos que ha enfrentado en el segundo trimestre, la mina Tambomayo de Buenaventura sigue teniendo una perspectiva positiva para el futuro. La empresa confía en que puede alcanzar sus objetivos de producción para el año 2023, lo que evidencia su resiliencia y adaptabilidad en el dinámico sector minero.