Con inversiones que superan los US$ 1,500 millones y la promesa de prolongar la vida de Antapaccay, el proyecto Integración Coroccohuayco se presenta como un faro de esperanza para la producción de cobre. Pero, ¿cuál es la visión detrás de esta ambiciosa iniciativa?
El deseo de aportar al incremento de la producción de cobre en el Perú ha llevado a la Compañía Minera Antapaccay, perteneciente al Grupo Glencore, a poner en marcha varias estrategias. Carlos Cotera, gerente general de la compañía, brindó detalles al respecto en una entrevista con Gestión.
Ubicado en Cusco, el proyecto Integración Coroccohuayco destaca en la cartera de inversiones de ampliaciones mineras. Este proyecto no solo busca impulsar la producción, sino que también tiene el objetivo de alargar la vida de Antapaccay por al menos un cuarto de siglo.
Mergiendo Tecnología y Minería
Enfocados en dos procesos estratégicos, el primero que Antapaccay está implementando tiene que ver con la incorporación de tecnologías. Estas no solo buscan mejorar la eficiencia de los procesos productivos, sino también abogar por la seguridad ocupacional y el cuidado del medio ambiente. Dada la exitosa implementación, Glencore, su matriz, planea replicar uno de sus programas en otras operaciones a nivel global.
El 2022 vio una inversión de US$ 9 millones en tecnología, proyectando retornos anuales de US$ 7 millones. Entre las tecnologías integradas se encuentra el Programa de Preconcentración, que determina con precisión las zonas sin mineral, permitiendo la recuperación del mineral en áreas de desmonte.
Con el avance tecnológico, Antapaccay busca alcanzar una completa automatización de sus equipos de perforación hacia finales de 2023.
Integración Coroccohuayco: Una apuesta de futuro
En cuanto al segundo proceso estratégico, el foco recae en el desarrollo del proyecto Integración Coroccohuayco. Este proyecto integral busca optimizar operaciones e involucra una inversión de más de US$ 1,500 millones, dirigidos tanto al yacimiento Coroccohuayco como a las plantas de procesamiento de mineral de Antapaccay y Tintaya.
Actualmente, se están realizando esfuerzos coordinados con autoridades y comunidades para garantizar la viabilidad del proyecto. Los beneficios que la minería ha proporcionado a Espinar son invaluables, con inversiones locales que superan los S/ 1,470 millones en la última década.
Aportes económicos y proyecciones
El impulso económico no solo se ha manifestado en inversiones directas, sino también en la contratación de servicios locales. En la última década, la empresa ha incrementado sus contratistas de 42 a 129. Estas colaboraciones han registrado cifras récord en negociaciones con proveedores locales, alcanzando S/ 200 millones en el último año, con proyecciones que podrían superar los S/ 300 millones en los próximos cinco años.
Respecto a las operaciones en la mina de cobre Antapaccay, los objetivos de producción se volvieron más desafiantes desde 2021 debido a menores leyes de mineral. Sin embargo, la gestión eficiente ha permitido un incremento en el tonelaje de mineral procesado.
Con miras al futuro, y pese a la contracción en la producción de cobre, el proyecto Integración Coroccohuayco se presenta como un salvavidas. Se espera que, en la primera década de operación, la producción alcance aproximadamente las 250,000 tms anuales.
Finalmente, aunque la compañía está explorando tres áreas de interés, la prioridad sigue siendo Integración Coroccohuayco, que promete transformar significativamente la producción y el panorama económico de la zona.