Con el respaldo de una estrategia ambiental bien definida, Anglo American avanza significativamente con su proyecto de reforestación que abarca 100 hectáreas, promoviendo la conservación de la queñua, una especie arbórea vital y en peligro, en la región de Moquegua.

En el camino de establecer un paradigma en prácticas de minería sostenible, Anglo American está alcanzando hitos significativos con su Plan de Minería Sostenible en Quellaveco. A través de la implementación de un invernadero inteligente, la empresa busca no solo dejar una huella verde, sino también fomentar una conciencia ambiental duradera en la comunidad. La queñua, una especie arbórea clave que actualmente está en una posición vulnerable, siendo categorizada como «en peligro», se sitúa en el centro de esta iniciativa verde.

El Plan de Minería Sostenible de Quellaveco ya ha visto la culminación exitosa de la reforestación de las primeras diez hectáreas del bosque de queñuas, un árbol integral para el equilibrio del ecosistema en la región de Moquegua. A través de jornadas voluntarias significativas, Anglo American, junto con sus colaboradores y contratistas, han plantado más de 1800 plantones, marcando el comienzo de un esfuerzo más amplio para restaurar y proteger 100 hectáreas de tierra.

Desde febrero de 2021, la campaña «Quellaveco deja huella verde» ha sido el lema central de este proyecto, buscando intensificar la participación y la conciencia ambiental entre los trabajadores y la comunidad en general. Según declaraciones de representantes de Anglo American, «Esta forestación […] continuará en los próximos años de manera más intensiva y siempre con el involucramiento de nuestros trabajadores pues buscamos generar en ellos conciencia sobre el rol importante que tiene cada uno para crear entornos saludables, de acuerdo con las políticas de sostenibilidad de nuestra compañía».

En un esfuerzo por lograr un impacto neto positivo, el plan busca mejorar las condiciones de biodiversidad en las áreas donde Quellaveco tiene operaciones, superando el estado del entorno antes de su intervención. Este proyecto resalta el compromiso continuo con la comunidad de Moquegua, promoviendo una relación simbiótica con el ecosistema local.

El primer paso crucial en este viaje fue la creación de un invernadero inteligente, equipado para albergar más de 70 mil plantones de queñua. Este invernadero, atendido por especialistas locales y miembros de las comunidades cercanas, cuenta con tecnologías modernas como sistemas de riego automatizado y mecanismos de ventilación y calefacción que se ajustan según las necesidades de las plantas, asegurando su óptimo crecimiento antes de ser trasplantadas.

Enrique Cachicatari, Supervisor de Biodiversidad de Anglo American, destacó los múltiples beneficios ambientales de la queñua, que incluyen la prevención de la erosión del suelo y la retención del agua de lluvia, además de proporcionar hábitat a varias especies de aves. Adicionalmente, Verónica Ramos, una miembro de la comunidad vecina y empleada de la empresa Pino, encargada del estudio y manejo de la queñua, resalta la importancia del proyecto: «Anglo American está formando este bosque de queñuas porque es bueno para nuestra salud, el medio ambiente y nuestra comunidad».

Con iniciativas como esta, Anglo American no solo demuestra su dedicación hacia la conservación ambiental, sino que también establece un estándar para la minería responsable y sostenible, un esfuerzo que se espera inspire a otras empresas a seguir su ejemplo, creando un futuro más verde y sostenible para todos.