Tras el lamentable ataque a la instalación de la Compañía Minera Poderosa en Pataz, que resultó en la pérdida de vidas humanas y múltiples heridos, el Ministro del Interior, Víctor Torres Falcón, ha tomado medidas decisivas para abordar la problemática de la delincuencia organizada relacionada con la minería ilegal en la región de La Libertad. Una de las acciones clave anunciadas es la instalación de una base policial en la zona, con el objetivo de brindar seguridad y tranquilidad a la población afectada por la criminalidad.

En una reunión celebrada en la sede del Ministerio del Interior, el Ministro Torres Falcón se reunió con representantes de la Compañía Minera Poderosa, incluyendo a su presidenta, Eva Arias, el gerente general, Marcelo Santillana, y el gerente de Asuntos Corporativos, Pablo de la Flor, para discutir las medidas a tomar en respuesta al ataque en la mina de Poderosa.

El Ministro, quien recientemente visitó Pataz y pudo conocer de cerca la problemática en la zona, enfatizó la importancia de garantizar la seguridad de toda la provincia liberteña afectada por la delincuencia. La base policial que se establecerá contará con personal de diversas unidades especializadas, lo que aumentará la capacidad de respuesta de las fuerzas del orden y fortalecerá la vigilancia y prevención del delito.

«Nuestro compromiso es proporcionar seguridad y tranquilidad en toda la zona, algo que nunca ha tenido lugar antes», afirmó Torres Falcón durante la mesa de trabajo. Además, anunció que en los próximos días regresará a Pataz para evaluar los avances del despliegue policial y las acciones realizadas por los efectivos en beneficio de la seguridad de la comunidad.

El ataque a la instalación de la Compañía Minera Poderosa ocurrió en la madrugada del sábado pasado, cuando un grupo de delincuentes armados lanzó explosivos al socavón de la mina. Esta acción provocó la trágica muerte de 9 trabajadores y dejó a otros 15 heridos. El Ministerio del Interior respondió de inmediato enviando un contingente policial a la zona, logrando la detención de 7 personas involucradas y la incautación de su armamento.

El atentado se atribuye a la organización criminal conocida como el «Tren de Aragua», que busca controlar la minería informal en la región. El incidente también dejó al menos 20 personas heridas, muchas de las cuales fueron trasladadas a clínicas privadas en la ciudad de Trujillo para recibir atención médica.

El establecimiento de una base policial en Pataz representa un paso importante hacia la erradicación de la delincuencia vinculada a la minería ilegal y la protección de la población local, así como el fortalecimiento de la seguridad en una región clave para la actividad minera en el país. La colaboración entre el sector minero y las autoridades es esencial para abordar este desafío y garantizar un entorno seguro y productivo para todos los ciudadanos.